Salamanca, Guanajuato, 24 de marzo de 2024.- La Secretaría de Salud con motivo del Día Mundial de la Tuberculosis, emprende acciones de concientización sobre esta enfermedad en los salmantinos.
Con el lema “En 2024 retomemos el camino hacia la eliminación de la Tuberculosis”, la dependencia estatal hace la invitación a la población a conocer la sintomatología de la enfermedad y ante la menor sospecha acudir a las unidades médicas para un diagnóstico y tratamiento oportunos.
Esta es una enfermedad infecciosa causada por la bacteria “Mycobacterium tuberculosis”, que afecta principalmente a los pulmones, pero también puede perjudicar a otras partes del cuerpo como son los ganglios, el cerebro, los riñones, los huesos, entre otros.
La manera más común de infectarse de esta enfermedad es de persona a persona por vía área, a través de gotitas de saliva que emite el paciente enfermo de tuberculosis al estornudar, toser o hablar.
Las personas que se encuentran cerca pueden inhalar estas bacterias e infectarse. En la población que se encuentra sana puede suceder que la micobacteria no infecte al individuo porque su sistema inmunitario actúa para bloquear a la bacteria.
Así mismo, las personas que tienen un sistema inmune débil, que padecen alguna enfermedad como VIH, desnutrición, diabetes, cáncer o que consumen alcohol, tabaco y otras drogas tienen un riesgo mayor de contraer la enfermedad si se encuentran cerca de algún usuario con este padecimiento.
Los principales síntomas de esta enfermedad son:
Tos productiva, pérdida de peso involuntaria, fatiga, fiebre, sudoración nocturna, escalofríos y pérdida del apetito.
En las unidades médicas de la Secretaría de Salud de Guanajuato se realizan pruebas para detectar a través de análisis de laboratorio, radiografía y valoración clínica si alguna persona puede padecer tuberculosis.
El diagnóstico se realiza mediante una baciloscopia, es un método de fácil acceso, que consiste en obtener una muestra de la flema del afectado al momento de acudir a consulta médica.
Afortunadamente la tuberculosis es una enfermedad que se puede tratar y curar.
Es un proceso que incluye una combinación de antibióticos tomados bajo la supervisión del personal médico, bajo el modelo conocido como “Tratamiento Acortado Estrictamente Supervisado”, siendo una táctica que ha funcionado y que permite que el paciente ingiera sus medicamentos sin falta y con un seguimiento adecuado.
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